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By David Magallanes / Guest contributor
In some parts of the country, unlike here in Ventura County, Latinos are very clearly a minority. I’ve heard of Hispanic American college-age students who were born and raised in Ventura County and who leave the nest, possibly for the first time in their lives, to attend a distant university. I recall talking with one local parent of such a child who opted to attend the University of Kansas (KU), for example. This young woman was culturally shocked when she found herself in a population that was predominantly white. It had never crossed her mind that this would “feel” different. Not that she was having any problems with them. It was just that she was suddenly immersed in a world that looked different, acted different, and thought and related with each other differently from what she had known all her life.
No longer was there a Latino subtext that permeated everything, at least to some extent, like in Ventura County, where Hispanic America has thrived for centuries. Here at home, where African Americans comprise roughly 2% of Ventura County inhabitants and Hispanics around 42%, it’s easy to understand why we don’t understand black America very much—there just aren’t that many African Americans around us. Many of us may not even have the privilege of counting black Americans among our friends, not because we don’t want them in our circle, but because there are so few in our environment.
Meanwhile, at the KU, African Americans number just over 1,000, and Hispanics just over 1,600 in a student population of nearly 25,000, some 17,000 of whom are white*. Hispanics are the proverbial drop in the bucket, whereas at least the African American students don’t feel quite so overwhelmed by numbers that relegate them to a status akin to a minority within a minority, as in Ventura County.
In comparison, at our local Channel Islands State University in Camarillo, Hispanics make up some 30% of the student population, whereas whites predominate at nearly 50%. As in the surrounding county, African Americans once again are only about 2% of the university’s student body**.
Envision a hypothetical, non-adventurous soul living in Ojai who never leaves town. In this city, some 13% of the population age 5 years or older speaks a language other than English in the home‡. But if this person were to muster the courage to move to, let’s say, Oxnard, imagine the culture shock of living in a city where more than 68% of citizens age 5 years or older speaks a language other than English in the home!‡‡ The culture would feel entirely different. A lifetime Oxnard resident who moves to Ojai might likewise experience at least a mild form of culture shock. And that’s just a matter of 25 miles!
‡ U.S. Census Quick Facts — Ojai
‡‡U.S. Census Quick Facts — Oxnard
— David Magallanes is a writer, speaker and social network marketing consultant. You may visit his web site, dedicated to honoring daughters and keeping them healthy, at www.roses4daughters.com.
You may contact him through e-mail at dmagallanes@roses4daughters.com. Follow us on Facebook (“Like” us!) at www.facebook.com/roses.for.daughters.
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Choque Cultural Americano
Por David Magallanes / Columnista invitado
En algunas partes del país, a diferencia de aquí en el condado de Ventura, los latinos son claramente una minoría. He oído hablar de estudiantes universitarios hispanos que nacieron y se criaron en el condado de Ventura y que se van del nido, posiblemente por primera vez en sus vidas, para asistir a una universidad lejana. Recuerdo hablar con uno de los padres locales de una hija que optó por asistir a la Universidad de Kansas (KU), por ejemplo. Esta joven fue culturalmente sorprendida cuando se encontró en una población que era predominantemente blanca. Nunca se le había pasado por la mente que esto “sentiría” diferente. No es que ella tuviera problema con ellos. Era sólo que, de repente, ella se encontraba inmersa en un mundo que parecía diferente, actuaba diferente, y pensaba y se relacionaban entre sí de una manera diferente de lo que ella había conocido toda su vida.
Ya no existía un subtexto latino que impregnaba todo, al menos hasta cierta medida, como lo hay en el condado de Ventura, donde Hispanoamérica ha prosperado durante siglos. Aquí en nuestra área, donde los afroamericanos comprenden aproximadamente el 2% de los habitantes del Condado de Ventura, y los Hispanos alrededor del 42%, es fácil entender por qué no entendemos muy bien a Afroamérica—simplemente no hay muchos Afroamericanos a nuestro alrededor. Es muy posible que muchos entre nosotros no tenemos el privilegio de contar con la amistad de Afroamericanos, no porque no los queremos en nuestro círculo, sino porque hay muy pocos en nuestro ambiente.
Mientras tanto, en la KU, el número de Afroamericanos es poco más de 1,000, y los Hispanos un poco más de 1,600 en una población estudiantil de cerca de 25,000. Entre ellos, 17,000 son de etnicidad blanca*. Los Hispanos son la proverbial gota en un balde de agua, mientras que al menos los estudiantes afroamericanos no van a sentirse tan abrumados por números que los releguen a algo que se parece a una minoría dentro de una minoría, como en el Condado de Ventura.
En comparación, en nuestra universidad estatal cercana, Channel Islands State University, los hispanos constituyen alrededor del 30% de la población estudiantil, mientras que los blancos predominan en casi un 50%. Al igual que en los alrededores del condado, los afroamericanos son, una vez más, sólo el 2% del total de estudiantes de la universidad **.
Imagínense una hipotética alma poco aventurera que habita en Ojai y que nunca sale de la ciudad. En este pueblo, alrededor del 13% de la población de 5 años o más habla un idioma distinto al inglés en el casa.‡ Pero si esta persona fuera a cobrar el ánimo necesario para mudarse, digamos, a Oxnard, podemos imaginar el choque cultural de vivir en una ciudad en la que más del 68% de los ciudadanos de la edad de 5 años o más habla un idioma distinto al inglés en el hogar!‡‡ La cultura se sentiría completamente diferente. Un residente que ha vivido toda su vida en Oxnard y que se mude a Ojai podría asimismo experimentar por lo menos una forma leve de choque cultural. Y eso es sólo cuestión de 25 millas!
‡ U.S. Census Quick Facts — Ojai
‡‡U.S. Census Quick Facts — Oxnard
— David Magallanes es un escritor, orador y consultor de mercadeo por las redes sociales. Usted puede visitar su sitio cibernético, dedicado a la honra y la salud de nuestras hijas, en www.roses4daughters.com.
Se puede comunicar con él por e-mail a: dmagallanes@roses4daughters.com. Síganos en Facebook (“Like”), http://www.facebook.com/roses.for.daughters.
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